Descripción
Estas fresitas silvestres son comunes en el bosque alto andino, están adaptadas hasta 2400m. y se ha probado su cultivo en pisos ecológicos más bajos. Necesitan buen drenaje y no mucha humedad. Pueden hacer una alfombra verde en seis meses, los frutos son deliciosos y muy valorados en platos especiales tipo gourmet. Crecen bien a la sombra del romero, del cedrón y de otras plantas arbustivas medicinales, menos la menta y hierba buena.