El chayote es originario de México y los Andes del norte de Ecuador y Colombia. Es una fruta que contiene calcio, potasio, magnesio, mucha fibra; mejora la circulación y favorece la salud del sistema nervioso. ¡También es delicioso!
Recetas de la finca
1. En ensalada, consúmelo crudo.
Pela el chayote y córtalo longitudinalmente. Saca la semilla y sus filamentos. Corta en trozos finos o «palitos», sazona con limón, sal y aceite. En México lo comen como una botana, con limón y chile piquín.
Resulta un rico acompañante de lechugas, pepinillo y tomate.
2. En caldos y sopas, úsalo como papa, siempre pelándolo y sacando la semilla. Una amiga lo ha recomendado en el caldo de gallina; en la finca hacemos un locro de chayote muy rico.
3. Asado al horno: coloca el chayote pelado en rodajas de un centímetro de grosor con aceite, sal, hierbas y queso para gratinarlo.
4. Nuestra receta favorita: el pastel pie de chayote

Prepara una masa para pie con los siguientes ingredientes:
- una cucharada de sal – 10 gramos
- 500 gramos de harina
- 125 gramos de mantequilla bien fría
- un cuarto de taza de agua colocada en cucharaditas
Procedimiento:
– Mezcla bien la harina con la sal .
– Añade la mantequilla bien fría y desmenúzala hasta integrar a los demás ingredientes. Puedes cambiar la mantequilla por aceite de coco y resulta delicioso.
– Añade el agua poco a poco hasta que tengas una consistencia blanda que se pueda amasar durante quince minutos.
– Amasa hasta formar una bola que colocarás en un recipiente, cubierto con un paño húmedo, en el refrigerador por una hora.
Para el relleno: chayotes en almíbar
- Pela dos chayotes, extrae las semillas y todos los filamentos alrededor.
- Corta en trozos delgados, con un tamaño similar a manzanas para hacer pie.
- Coloca al fuego con panela o azúcar morena, clavo, pimienta dulce, anís estrellado, hasta que estén dorados y suaves. Retira del fuego y deja enfriar.
- Saca la masa del refrigerador y extiéndela con un bolillo, colócala en un molde para pie o sobre una bandeja.
- Pon el almíbar con los trozos de chayote, añade toctes picados, nueces, pasas o déjalo solo, como prefieras.
- Llévalo a un horno precalentado a 180″C durante media hora.
¡DISFRUTA TU PIE DE CHAYOTE!
Y si prefieres fermentarlo:
Corta el chayote en trozos según tu elección, sin cáscara ni semilla. Prepara un vinagre suave con una taza de vinagre blanco de frutas por dos de agua, una cucharada de azúcar morena, una cucharada de sal marina, especies como cardamomo, canela, anís estrellado, pimienta dulce. Lleva al fuego la mezcla durante cinco minutos; luego, añade el chayote que se cueza durante un minuto y apaga el fuego. Coloca los chayotes en un frasco esterilizado previamente, presionando de manera que quede la menor cantidad posible de aire. Vierte el líquido hasta el borde del frasco y tapa sin sellar. Deja a temperatura ambiente durante dos días, si ves burbujas que indican fermentación, ¡lo hiciste bien!! Abre y cierra el frasco por siete días aproximadamente, hasta que no registres actividad. Entonces completa el agua con salmuera si se ha perdido, cierra y guarda en el refrigerador o lleva a baño María para sellar al vacío y mantener la conserva durante un año en la alacena.